Charly Summer – El gran juego: una historia de Charly Summer
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Jessica (Charly Summer) no quiere nada más que llamar la atención de su padrastro, Ryan (Seth Gamble). Es seguro, tranquilo y estable... todo lo que ella quiere en una figura paterna. Pero Ryan es el típico macho alfa cuando se trata de todo lo relacionado con el fútbol, lo que significa que cuando hay un juego, no se permiten mujeres en su cueva de hombres, ni siquiera Jessica...
Pero no importa cuánto la aleje Ryan, Jessica hace todo lo posible para intentar ganárselo. Lo único que quiere es que le guste, aunque empieza a quedarse sin ideas. Dado que intentar ser dulce y complaciente no funciona, es hora de esforzarse más que nunca.
La mañana del gran partido, Ryan le grita a Jessica que salga de la casa para poder disfrutar del partido en paz. Aunque Jessica está de acuerdo, se pone astutamente ropa interior reveladora y entra casualmente a la cueva del hombre. Ryan se sorprende de inmediato al ver el cuerpo caliente de Jessica, tratando de mantenerse bajo control mientras le ordena que se cambie. Pero en lugar de ponerse algo conservador, Jessica regresa con un diminuto uniforme de fútbol y medias de red.
Una vez más, Ryan queda anonadado, apenas capaz de apartar los ojos de ella. Jessica es juguetona y pregunta si puede quedarse y ver el partido. Aunque Ryan le recuerda que se SUPONÍA que debía irse, él gruñe diciendo que supone que ella puede quedarse... siempre y cuando esté callada.
Jessica, sintiéndose más valiente que nunca, se instala a su lado. Ella SABE que este es su momento y lo aprovecha. Envalentonada, abre un poco las piernas y comienza a tocarse, claramente queriendo que Ryan la pille en el acto. Cuando finalmente lo hace, se sorprende y trata de regañarla, pero Jessica ve la lujuria primaria en sus ojos.
Mientras Jessica le dice que se relaje, la determinación de Ryan comienza a desmoronarse cuando el hambre se apodera de él...